Tras semanas complicadas para los guardavidas marplatenses, por el pedido al nuevo gobierno por el pago de sueldos atrasados a cargo de la administración anterior, que comenzó con un paro de 24 horas y terminó con un reclamo frente a la municipalidad y un fallo en contra el gobierno municipal por no garantizar las condiciones mínimas de seguridad e higiene en los balnearios del sur de la ciudad.
La nueva dirección a cargo de Dr. Carlos Fernando Arroyo tuvo su primer conflicto gremial tras su asunción, ya que el viernes 11 de diciembre, el sindicato de guardavidas le reclamaba el pago de sueldos de octubre y noviembre a quienes trabajan en la zona de Chapadmalal y sólo noviembre para los que cumplen su labor en la ciudad, en síntesis, una deuda de más de 11 millones de pesos.
Frente a la municipalidad, en un paro de 24 horas, que podía extenderse si no había acuerdo, los guardavidas marplatenses, mejor dicho, un sector importante la Unión de Guardavidas Agremiados (UGA) decidieron ir a reclamarle a intendente entrante los salarios adeudados.
Pablo Della Vella, Jefe de Sector de Operativo en Playa, habló sobre este conflicto y nos dijo: " El gobierno de Arroyo nos pidió disculpa y después de 3 o 4 días, nos abonó los sueldos, dentro de unos días se pagará el aguinaldo correspondiente y un aumento".
Pero esto va más allá del reclamo salarial, también se reclama por la falta de elementos que es uno de los problemas fundamentales para que cada uno cumpla su función. A principio de año, la UGA presentó un amparo contra el gobierno municipal por no garantizar las condiciones de seguridad e higiene en los balnearios del sur, entre ellas, la ya mencionada falta de elementos.
Este reclamo, se desató debido que en marzo se hizo un relevamiento de 64 puestos, desde Escollera sur hasta Las Brusquitas, ninguno cumplía con las condiciones mínimas de seguridad e higiene. Sin embargo, el fallo solo ordenará que se cumplan las normativas vigentes en leyes, ordenanzas y decretos en la disposición de elementos para proteger a los bañistas y a los guardavidas mismos.
Pero este problema, está tan aceptado que en los cursos, que les avisan, enseñan y preparan para a trabajar sin las piezas de trabajo necesarias, contaba Franco Della Vella, hijo de Pablo y estudiante del curso de guardavidas Mar Chiquita, que hace su cursada en el Club Kimberley. A su vez, Pablo nos confiesa que no es fácil trabajar sin elementos y que él se tuvo que armar de su propio equipo de trabajo, una rosca, un torpedo y un silbato ante la ausencia del gobierno.
El Sr. Della Vella, hace la comparación con otros países, como Brasil y él aclara que estamos mucho mejor, ya que con respecto a ellos tenemos más elementos y servicios, porque durante el día hay horas donde no tienen guardia. De hecho, on record, contó que él mismo tuvo que hacer un recate en el país vecino por la falta de guardavidas trabajando.
Juan Cordonier, también Jefe de Operativo de Playa, nos contó sobre uno de los pedidos más importantes para los guardavidas, la extensión de servicio de seguridad en playa: "Me parece algo positivo porque Mar del Plata tiene que tener turismo todo el año y abre muchas más puertas para que entre gente a trabajar, sabemos que la ciudad balnearia cada vez tiene más gente de visita y necesitamos ampliar la seguridad"
Esta petición, trata de incrementar el trabajo por 6 meses, 180 días laborales, ya que ahora sólo se cumple función por 5, que serían 150 días laborales que se hizo efectivo a través de una ley que se garantizó en agosto de este año, que ayudaría a otros distritos más pequeños como Mar del Tuyú, Mar de Ajó y más, pero no a nuestra ciudad, que en el mes de abril muchos turistas vienen a pasar semana santa a la ciudad y disfrutan de las playas, pese a la falta de servicio y que no sea sólo en Playa Grande, La Perla, El Torreón o la colonia turística de Chapadmalal, que si cuentan con guardias mínimas durante 180 días, si no todas las playas, de norte a sur.
Sin embargo, esta nueva ley, la 14.798, no incluyó ningún apartado respecto a la jubilación de los guardavidas. Si se pueden jubilar pero sólo aquellos que tengan más de 50 años y 100 meses de aportes, de los cuales 51 deben ser provinciales.
Por otro lado, también se pelea por la jubilación para los guardavidas privados, quienes desempeñan su trabajo sabiendo que cuando lleguen a los 50 no gozaran de ese privilegio, por lo que hace que cada año algunos trabajadores dejen sus puestos.
Hoy, quienes cumplen su función en las playas privadas, tienen un sistema especial en base a los trabajadores que aportan a la ANSES y eso queda ahí, porque para poder cobrar tendrían que tener 75 años, por lo que la gran mayoría duda de que a esa edad puedan seguir trabajando en las playas. Si no los municipalizan, en un futuro no podrán tramitar su jubilación a través del IPS. Esta lucha comenzó hace años y aún sigue en pie ya que por cada tres temporadas trabajadas les corresponde un año de aportes.
Este conflicto comenzó en 1990 cuando se privatizó el servicio de seguridad de las playas lo que hoy genera una precarización laboral y que impide el acceso a una jubilación digna, derecho del que sí gozan los guardavidas que dependen del municipio.